Al principio, antes de él, no era nada. Yo, no era. Nada. Ni siquiera era un principio. Tampoco un proyecto. Era nada, pura página en blanco. Un vacío. Algo por hacer, por ser...
Durante es el ahora, lo que esta sucediendo, pasando, lo que me da forma, lo que se contará de mí, una futura narrativa, una historia por contar. Difícil es, ya lo decía Gombrowicz, contar algo, ese algo que somos, que estamos siendo, lo que nos sucede, a lo que sucedemos, transmitir el ahora en el momento justo de estar siendo. El ahora, el durante, es lo que se vive sin poder decir nada de él.
El después. Ahora que ya termino todo, ahora que el suceso, lo que sucedía en el durante, ha terminado definitivamente, no soy más que memoria. Data inservible, acumulación, almacenaje de recuerdos que serán olvidados y reinventados. La memoria algo que fue y ya no es. Historia, narrativa, pura literatura de ficción. Un final.