Tientos y tarantas, bulerías
en la sobremesa
amenizan esta pronta noche llena de lluvia
junto con
conversaciones livianas que nos traen de allá
recuerdos compartidos.
Todo ese camino andado anónimamente,
irrelevantes sucesos, sombras de un ayer,
que dan el argumento de nuestra conversación
mientras esperamos que amanezca.