el día ya se apaga
ya todo es noche cerrada
y la ciudad entera
duerme en un silencio
de ambulancias y aullidos anónimos
una calma oscura
parece gobernar todo
y, por suerte, nada más sucede
y lentamente mis ojos van cayendo
y me dejo ir hacia donde tengo que ir
lugares que apenas recordare
mas que como destello
de algo que nunca sucedió
tan sólo, un merecido descanso
lo importante
para volver a ser
cuando todo vuelva a ser
pero ahora ya nada importa
ya todo duerme
y yo me voy
y dejo de ser
y no soy mas que un cuerpo dormido