ESCRIBIR UN DIARIO NOS AYUDA A OLVIDAR LA ILUSIÓN DE TENER UNA VIDA PRIVADA
(ricardo piglia)

HAGO MI FICCIÓN PARA QUE SEA CIERTA
(pentti saarikoski)

sábado, 20 de octubre de 2012

LLUVIA

Esta noche, esta otra noche que ya termina.
Un ayer para ti, lector. Un ayer que aun es
un todavía para este que camina sin compañía
bajo la lluvia camino de Cibeles,
medio perdido, queriendo perderse más.

La soledad a estas horas de la noche,
un breve dolor que mañana será olvidado.
Ligera punzada de un deseo insatisfecho:
mis manos una vez más no se enredaron
en tu negra cabellera salvaje.

Otra noche, triste final, deriva de un mal día
en que una pequeña flor silvestre
intento cortar su propio tallo queriendo ser libre,
y desprenderse de sus pétalos en un intento
por eliminar el dolor, el dolor de estar vivo.

Nada que merezca ser reproducido.
Nada ni nadie tiene la culpa,
siempre es la misma tristeza,
una tristeza siempre vestida de noche.
Noche que termina cubierta de lluvia.