ESCRIBIR UN DIARIO NOS AYUDA A OLVIDAR LA ILUSIÓN DE TENER UNA VIDA PRIVADA
(ricardo piglia)

HAGO MI FICCIÓN PARA QUE SEA CIERTA
(pentti saarikoski)

sábado, 5 de septiembre de 2015

LARGO DíA, ENTERO CON TODAS SUS HORAS

suena el despertador, las siete de la mañana
un maravilloso luminoso sábado da comienzo
tras el desayuno, bajo a la calle para dar un paseo al perro
hace frío, por primera vez en todo el verano
siento la necesidad de ponerme la sudadera
en seguida aparecen los chicos 
hoy nos vamos a cuenca
nos espera una breve visita 
hoy todos tenemos que estar de vuelta en la capital
todos tenemos alguna cita o algo que hacer
pero no importa, esta es una mañana de reencuentros
por el camino nos vamos contando anécdotas
sucesos que dieron algo de sentido a estos días pasados
al mismo tiempo que nos comunicamos con el resto
mensajes cruzados por los teléfonos
al final nos decidimos por el merendero
quedamos en vernos en el mirador
tras los saludos, sin demora empezamos a escalar
un día lento que trae una lenta motivación
nada memorable, nada a tachar
más proyectos que se unirán a la lista interminable
tras el último peque ya estamos de vuelta a madrid
planeando la temporada otoñal que ahora comienza
muchos metros por escalar que nos esperan

la ciudad otra vez, la ciudad y su noche
otra vez un reencuentro de los amigos de siempre
la excusa es planear un viaje juntos para finales de año
juntarnos los cuatro otra vez
el destino está por decidir, lo único importante
es hacer cuadrar las fechas
reunirse y beber, sabemos que será una resaca larga
la juventud pasó, y los intentos de acercarse otra vez
a aquellos años de desenfreno
se pagan, y lo que antes era un leve malestar
ahora pueden ser días de estado depresivo
pero no importa, hoy no importa
porque estamos todos juntos otra vez
y no hay nada más bonito
pocas cosas me hacen sentir tanta felicidad
esta es una de ellas, todos juntos otra vez

paseamos por el centro de la ciudad
de lavapiés a gran vía de bar en bar
caminamos bebiendo como entonces
las latas de cerveza de los banglas y los chinos
nos cruzamos con una noche de aspecto distinto
sucede exactamente lo mismo
jóvenes que caminan sonámbulos
todos drogados, cargados de sueños
con un hambre voraz de comerse el mundo
pero algo ha cambiado en ella
su aspecto ya no es el mismo, parece que estamos fuera de lugar
modernos se agolpan en las colas de todos los clubs
mientras buscamos el que más se ajuste a nosotros
nos decidimos por uno de rock con entrada libre y cerveza barata
dentro encontramos un rincón

la noche empieza a caer, el cansancio empieza a ceder
me siento viejo, y veo como todo ha cambiado
sin atrever a preguntarme si no seré yo el que ha cambiado
miro a mi alrededor, no me siento parte de lo que me rodea
las drogas ya no me emocionan, ya no suben
la verdad es que ya no dan nada
es intentar coger un recuerdo que ya no existe
empiezo a mirar el reloj, quizás sea hora ya de volver

la última cerveza antes de despedirnos otra vez
un último baile antes de decir adiós
en la calle nos abrazamos y nos damos muchos besos
los ojos nos brillan de felicidad
ha sido y será una bonita noche para guardar
las fechas han sido ya cerradas y en breve nos volveremos a ver
cada uno coge un camino distinto
adiós chicos, ha sido una noche llena de amor y felicidad

en el metro es hora de cambiar la sintonía
nada podrá borrar las horas, todo lo que sucedió
pero el metro, en soledad, es lugar para la melancolía
echar la vista a la noche, a lo que fue y a lo que no pudo ser
todas las chicas guapas que se fueron
todas las diosas de la noche
todas amantes y amadas
otra vez volviendo solo a casa
cargando con mi eterna timidez

y otro día termina, este día que empezó
a la misma hora en que es ahora 
cuando todo amanece y oscurece a la vez
feliz por todo lo pasado y por lo tenga que volver a ser
decidido a dormir por fin, a dormir y a soñar
merecido descanso tras este largo día que ya se acaba