nena,
este calor hace que me ardan las entrañas
no
hay descanso posible, ni sombra que me cobije
ni
siquiera en la noche, cuando el aire es plúmbeo
septiembre
y el verano que no amaina
no
hay escapatoria posible
somos
testigos del fin del mundo
es un
calor imaginado por una mente perversa
un
dios vengativo
incapaz
de entenderse sin nuestros lamentos
nena,
hoy mi cuerpo es de cera
tócalo
y veras como te pringas las manos
tócalo
y veras como me deshago en tus manos
pero
no tengas miedo, ven y tócalo
seamos
otra vez un solo cuerpo
deja
que me funda en ti