pocas cosas
hay mejores
que el
silencio compartido
con un buen
amigo
así toda la
mañana, sólo
diciendo lo
justo
las
recomendaciones previas
al asalto de
la vía
los ánimos
sentir como
escala mi compañero
por en el
movimiento de la cuerda
sin voces ni
gritos
solo cuando
el esfuerzo
lo requiere
ese soltar
el aire haciendo ruido
ese plus
extra que te ayuda
en el paso
complicado
el resto son
sólo miradas cómplices
no hay
porque rellenar el aire
de conversaciones
innecesarias
ni siquiera
en el manolo
cuando lo
único que importa
es el sabor
de la cerveza
porque es
ahí donde siempre
termina todo
lo demás sólo
es un viaje de regreso
también en
silencio
hasta que
nos decimos hasta luego