El
atardecer no es un atardecer especial.
Javier
Calvo
Un
organismo carente de propósito, eso es lo que soy
Como
el mar que sucede esta insignificante tarde
Un
mar ausente, por entero, imaginado
El
personaje principal de la novela que escriben mis propios recuerdos
Una
lectura ligera, estival, de relatos breves que se olvidan nada más
terminar
De
argumento sencillo, personaje carismático y un desenlace previsible
Entretenimiento
para las horas posteriores a la siesta y previas al atardecer
Ese
momento en que nada sucede, nada pasa, más que una espera
En
el que otro desenlace, el del día, acontece a la esperada noche
Donde
beber y fumar y beber, en la que buscar compañía
De
tan común y cotidiano, la historia universal de la inmediatez