el invierno
persiste en ser
en estas mañanas
góticas de niebla y fina lluvia
la ciudad se
limpia, se engalana quizás
para la
inminente primavera
cuando la
ausencia de agua
queme nuestros
pulmones: aire negro
veneno que
respiramos sin remedio
no hay
escapatoria posible
humano muy
humano, encerrado en lo humano
eso somos:
tristes figuras rebosantes de ego
incapaces de
aprender trucos nuevos
imparables
camino de
precipicio
(la lluvia no me detendrá
bajaré hasta el fondo
cubierto de lodo
regresaré como de un sueño
feliz
por no haber sido
altas dosis de cafeína
me impulsan a seguir bajo la lluvia
endureciendo los cayos de las manos
siempre pensando
dónde está la salida del laberinto
(la lluvia no me detendrá
bajaré hasta el fondo
cubierto de lodo
regresaré como de un sueño
feliz
por no haber sido
altas dosis de cafeína
me impulsan a seguir bajo la lluvia
endureciendo los cayos de las manos
siempre pensando
dónde está la salida del laberinto
