lo fácil es
empezar
diciendo que el cielo está azul
despejado de
las nubes pasadas
que
provocaban ese gótico sentir
en mis
rutinarios despertares
es la suerte
quizá o una simple coincidencia
pero
prefiero pensar que esto se debe
a que hemos
sido buenos chicos y el destino
feliz nos sonríe
otorgándonos este primaveral día
para que
podamos desarrollar y avanzar libres
por nuestra
amada verticalidad
en un
continuo no hacer, en una búsqueda sin objeto
estar aquí
con los bichos ya es un regalo a agradecer
ya sucedió
la semana
olvidada
está la pesada rutina y los días iguales
lo que queda
es simple gozo
breve sentir
de los días sin peso
sabemos que
es mejor que sea así: breve
pues la
eterna felicidad acaba siempre perdida
convertida
en rutinario suceder
la lección
del día es: no trabajar
en los que
nos hace felices
pues a la
sombra caerá y sin sueños se vivirá