vuelven los
días grises de gótico despertar
tan rápido
como creímos haberlos olvidado
tan rápido
han regresado, siempre acompañados
por esa
constante amenaza de lluvia
entonces
este esperar se vuelve incómodo
nada que
hacer más que esperar con el frío
a que la
jornada finalice, mientras tanto
mis manos
heladas buscan el calor de tu piel
sin
encontrarla en el acomodo deseado
tanta ropa
que nos cubre en este invierno
tantas
miradas que nos observan en estas calles
entonces es
cuando me vuelvo demonio
un ángel
caído que muestra su peor cara
sólo pienso
en terminar cuanto antes
salir corriendo
de esta rutina que se extiende de más
que me roba
un tiempo no pagado
un esfuerzo
que no será recompensado
un tiempo
útil para servirse de él sin cohibiciones
ver cómo se
va el día
mientras
gasto la tarde en el muro
mientras me
pierdo en el horizonte de tus ojos
mientras
decido yo que no hacer con mi tiempo