todo vuelve
a ser un tener que hacer
desde
primera hora de la mañana
haciendo sin
parar, subiendo calles
hasta que
vuelves a casa y la noche
cae encima,
sobre tu cansancio y tu hastío
nada queda
entonces, oscuridad y calles vacías
el frío del
invierno y la falta de apetencias
la página en
blanco, tan manida
que ha
perdido el valor de uso
pero
persiste, como metáfora perfecta
de lo que no
es: el espacio que recorro
encerrado dentro
de mí, imaginado
posibilidades,
líneas de fuga
un futuro por
suceder