abandonamos
el que ha sido nuestro hogar
salimos de
punta braccetto
cargando con
cierta ambivalencia
por un lado
la tristeza
de dejar aquí a nuestros anfitriones
pasará un
tiempo hasta que nos volvamos a ver
por otro
el viaje
continua, nuevos lugares nos esperan
el primer
punto a tachar en el mapa es pantálica
una necrópolis
milenaria
nichos
excavados en las paredes rocosas
un cañón
calcáreo, paredes
sobre las
que se puede escalar
pero mi
devoto amor por la verticalidad
tendrá que
esperar, esta vez el viaje es otro
luego al aeropuerto,
uno de los nuestros retorna
las
obligaciones mandan y el tedio
emite
ordenes en la distancia
el resto
seguimos, el etna nos espera
pero antes
sufrimos la caótica hora punta de catania
algo más de
una hora
para
encontrar la ruta de salida
un gps que
no funciona y un dedo sordomudo
que no sabe
moverse por el mapa
pero ya
estamos aquí, tumbando nuestro cansancio
en un
albergue que tiene mucho, mucho
que envidiar
al lugar del donde venimos